viernes, 29 de junio de 2012

ENTRE OJOS - Luisa Fernanda Vanegas


En nuestra tercera edición tendremos a la escritora Liliana Varela, nacida en Buenos Aires – Argentina, la cual nos contará un poco de su vida.

¿Quién es Liliana Varela? 
Definirse uno mismo es lo más parcial que pueda existir pero intentaré hacerlo. Creo que soy una persona más, alguien ansioso por naturaleza, hiperactivo por práctica diría, no sé, alguien que quiere disfrutar lo que hace y que a la vez es un granito más de arena de la infinita playa que conformamos los humanos.

¿Cómo fue su acercamiento a la literatura?
No puedo precisar el cómo, creo que comenzó de la misma manera que todos, leyendo libros que me compraban mis padres. Horacio Quiroga, Oscar Wilde fueron mis primeros acercamientos con la literatura pero creo que mucho, mucho tuvo que ver la televisión en ello porque siempre amé el cine y las películas y eso me acercó a la lectura. En la adolescencia el Martín Fierro fue mi libro podríase decir de cabecera.

¿Qué es para usted la poesía?
Una forma de expresión. Siempre me gustó la poesía que me deja algo, sea un sentimiento, una reflexión, una estética determinada. Debo confesar que me inclino más por la que me deja pensando.

¿Recuerda su primer poema?
Sí. No todo por supuesto pero tiene una anécdota. Tendría 5 años y mi papá había comprado una agenda nueva, de esas grandes con una hoja por cada día, de tapas de cuero...un día la buscó…y la encontró , obvio que con un poema mío, muy infantil por supuesto. No supo si retarme o darme besos; se decidió por lo segundo y esa agenda aún está conmigo –aunque sus hojas se terminaron hace mucho tiempo ya cuando dejé de escribir siendo adolescente.

¿Cuáles son los temas más recurrentes en su escritura?
No voy a negar los temas que creo me signan, la muerte es el eje primario, lo efímero de la vida, la soledad, la auto reflexión, el buscarse a sí mismo entre otros temas existenciales. Y no es que no haya intentado otros estilos –que lo he hecho- simplemente cuando releo descubro que “ahí están” los mismos temas orbitándome.

¿Cuántos libros ha publicado?
En total son 7 creo, 2 de cuentos, 5 de poemas - 1 compartido con otra escritora argentina-. Ahora estoy a punto de editar el 8vo que consiste más en observaciones de la vida –prosa y poesía-  de un momento particular que me tocó vivir .

Háblenos un poco de sus programas radiales, ¿Cómo nació esa idea?
Yo incursioné, por casualidad podría decir, en la radio en el 2007, acompañando a quién realmente hacía el programa -que versaba sobre lectura de poesía. Luego de dejar ese programa a los seis o siete meses tuve la idea de hacer un programa de radio con base en la literatura pero que abarcase más que la simple lectura, un espacio donde también los narradores tuviesen lugar al igual que las letras en otros idiomas y diferentes secciones. Por sobre todo, lo que no quería era un programa unidireccional ni aburrido, mucho menos serio ó de etiqueta. Se lo propuse a Patricia Ortiz y así nació la idea que hoy día lleva más de 4 años y más de 200 programas. Obviamente entre las dos gestamos muchas más ideas sobre la organización del programa.
Este año, en Mayo de 2012 nació la oportunidad de estrechar lazos con una radio emisora de Chicago de habla hispana –Radio que yo había conocido personalmente en Marzo de 2011 cuando me invitaron a un programa- No era una idea para desperdiciar porque el objetivo es unir el habla hispana, así que ahora estamos con Patricia en dos programas de radio, uno de Argentina y otro de EEUU.



¿Alguna anécdota que desee contar? 
Muchísimas pero no daría el lugar para publicar todas jaja. Lo que sí destaco –y lo seguiré haciendo siempre- es el maravilloso invento de Internet que permitió la comunicación y el conocimiento de tantos y tantos amigos. Esta entrevista es un claro ejemplo de ello y máxime el hecho de que quiénes editan la revista sean dos seres tan queridos para mí. Así que GRACIAS por el tiempo y lugar que me dedican.
Liliana Varela

Nota: por favor adjuntar algunas fotografías y los link donde nuestros lectores puedan leer mas de usted.

Muchas gracias por la atención.

Links
Radios
Al borde de la palabra:  http://www.arinfo.com.ar
Voces del Sur:  http://www.radiocosmos.net

Blog personales :
http://lilianavarela.blogspot.com
http://gennarrativo.blogspot.com

Ediciones Muestrario:
http://www.edicionesmuestrario.com.ar  (también en Facebook)
Belisama-encuentros literarios- (en facebook)



Blanco Mundo


Cada paladeo gesta un nuevo mundo
del cuál soy dueño

o tal vez esclavo

(imposible darme cuenta).



¿Y por qué no?

Beber la dulzura

de un espumante vino (blanco)

hipnotizándome el ahora

y el después.



Botella transformada en navío

sin rumbo (prefijado)

errante subterfugio donde

acallar los gritos.



Y allí Caronte

fermentando el azúcar

hasta volverlo río.



Y allí la hoguera

donde quemar las penas

que no han sido aún.



¿Y qué?

¿Quién osará crucificarme?

¿Quién elevará su acusador dedo

para señalarme?



¡Pobres ellos!

los morales, los correctos,

los estereotipadamente sobrios

que controlan la palabra

y el pensamiento

antes de respirar.



Aquellos. Sí. Esos.

Los corruptos, los promiscuos,

los que matan sin saberlo

-sólo con la palabra y el desdén-

los que venden su alma por centavos,

mienten, blasfeman, critican

en aras de la conveniencia.


Los que no admiten

que el veneno

no está en el alcohol

sino en la mano que lo elige,

que el tóxico está en la esencia

que vomita al mundo

su verdadera faz

-sin maquillaje-

ESCENARIO - Luisa Fernanda Vanegas



ALVARO MARIN VIECO 
Procedente de una familia de célebres pintores, escultores, músicos; y protagonista desde los años setenta de bienales en México, Cuba, Colombia, Argentina y Brasil, y de exposiciones itinerantes en Estados Unidos, Inglaterra y Bélgica, Álvaro Marín Vieco ha logrado crear un lenguaje propio en sus abstractas y geométricas obras, trabajos en los que el papel principal usualmente está reservado para los cuadrados, figuras que al fundirse con la amplia gama de tonos que utiliza el artista, inquietan profundamente las mentes de quienes las admiran.
Este maestro del arte hace parte de esa primera generación de artistas urbanos que se dio en Medellín a partir de la década de 1970. Él viene de una familia de pintores de academia, pero logra hacer una ruptura enorme, abrir un nuevo campo.

Este arquitecto de profesión, además de pintor y escultor, se alejó de la pintura figurativa que predominaba en la academia antioqueña en aquel tiempo y se encontró con aires modernos que se expresaban en las escuelas de Europa y Estados Unidos.

Su abuelo, el escultor, Bernardo Vieco, hizo varias esculturas públicas como la fachada del Teatro Municipal Jorge Eliécer Gaitán. Su padre fue co-fundador de la Orquesta Sinfónica de Antioquia y miembro de la Orquesta Sinfónica de Colombia. Su tío era el arquitecto Hernán Vieco, quien junto a Salmona y Dicken Castro hizo parte del grupo de arquitectos que han hecho en Bogotá la mejor arquitectura.

Vieco es gran amigo de García Márquez y Álvaro Castaño Castillo. También conoció y contrató a Pablo Picasso para el edificio de la Unesco de Paris y trabajó con Le Courbousier y Breur entre otros.
Nació en Medellín en 1945, en el seno de una de las más importantes familias de artistas que ha tenido el país. “Mi papá era chelista de la sinfónica, y mi abuelo escultor, y todos los hermanos de mis abuelos, como Carlos Vieco, eran músicos, violinistas, dibujantes, arquitectos, incluso tuve un tío que, cuando trabajaba en la Unesco, conoció a Picasso, y él me contaba todo eso. Yo me críe dentro de la música y la pintura, era una vida, digamos, mítica”, dice.

Pero cuando llegó a la universidad para estudiar arquitectura se cambió los apellidos. Su nombre real, cuenta él, es Álvaro Vieco Vieco. ¿Por qué lo hizo?
“No no no no no. Es que eso era muy duro. Ser Vieco, ¡y dos veces Vieco!, porque mi mamá es prima hermana de mi papá, y yo todavía estoy esperando que me salga un rabo.

No no no no no, llegaba a la universidad y todos los profesores esperaban mucho de mí, mejor me lo cambié por Marín”, cuenta él.

Si estudió arquitectura fue porque sus papás temían que como pintor fracasara. “Pero igual fracasé como arquitecto, y como violinista, porque también estudié violín en el conservatorio. Hice dos casitas por allá en Rionegro, pero me quedaron horribles”.

Álvaro Marín sostiene que es “la oveja negra de la familia. Sólo por molestarlos quería escribir un libro que se llamara ‘Pase maluco con el bambuco’, porque en mi familia componen bambucos”.
“Quería ser pintor pero no había dónde estudiar. Estaba Bellas Artes, pero me aterraba, era una academia de lo más retrógrada. Mientras en Europa y en Estados Unidos estaban en el impresionismo y el cubismo, aquí nada, puras vaquitas, bodegones y casitas”, cuenta. “Yo quitaba de mi casa las acuarelas de mis tíos para venderlas y así poder pintar, eso era así, de ese tamaño”, recuerda sobre la Medellín de esos años.

En su juventud, que ocurrió entre las décadas de 1960 y 1970, fue amigo de unos muchachitos que más tarde serían los más importantes artistas y escritores de Medellín: Óscar Jaramillo, Hugo Zapata, Jaime Jaramillo, Darío Ruíz, Ronny Vayda, Manuel Mejía Vallejo, Félix Ángel, Jaime Espinel.

Entre ellos mismos se hacían visita de casa en casa, ellos mismos veían qué era lo que sus compañeros estaban haciendo.

“En las tardes nos ibamos para el café Versalles todo el día, y allá nos aguantaban sin un peso, sólo con un tinto, con una Coca Cola, hasta que llegaban las seis y alguien nos invitaba a un aguardientico. Y allá conocí a los nadaístas, primero los mirábamos como a unos monstruos pero luego fuimos amigos. Nos íbamos para Lovaina a hablar de literatura y arte, y a las prostitutas las queríamos mucho porque nos cuidaban, nos daban desayuno”.

Y a Medellín llegó el rock, el Festival Ancón, las Bienales de Arte de Coltejer, y con ello una transformación para la ciudad y sus artistas, aunque al principio la ciudad no aceptaba ese cambio.

“Nos enloquecimos todos. Llegó el hippismo, una tía casi me ahorca porque un día me puse un collar. Los buses no nos paraban. Y en el Festival Ancón la policía perseguía a los hombres de pelo largo y los rapaba”, relata sobre ese tiempo.

“Fernando Vallejo y yo tuvimos un grupo de rock que solo duró tres compases, no fuimos capaces de ponernos de acuerdo con una canción de los Beatles”.

Marín le guarda un especial cariño a las Bienales de Arte de Coltejer, a finales de los años 1960, cuando a la ciudad llegaron importantes artistas de todo el mundo y había un público que quería ver esas obras.

Recuerda que en esos años “Marta Traba se vino de Bogotá a pelear con estudiantes, a debatir de arte, a crear espacios. Hicimos todo un movimiento. Nosotros éramos muy guerreristas, y la prensa nos paraba bolas. Queríamos un sitio para nosotros, para exponer, porque el Museo Zea – hoy Museo de Antioquia – estaba muerto”.

Así fue como crearon el Museo de Arte Moderno de Medellín, “pero lo creamos con las uñas, a sangre, sudor, lagrimas y trago”.
“Yo era profesor de arte en la Universidad de Antioquia, pero me sacaron por indisciplinado, porque yo les decía: ‘profesores, ustedes son tan malos que vengan yo les hago una transfusión para que tengan sangre de artista’”, relata mientras extiende el brazo y se toca una vena.

No le gusta la academia pura, caposa, donde, como él dice, “se pierde el espíritu investigador, aventurero, libertador y riesgoso. Yo nombré a esos profesores como ‘La Santa Sede’, y me echaba la bendición cuando pasaba delante de ellos”.

Quiere ser como Mick Jagger, su ídolo. Ama el rock, pero también la música electrónica, que descubrió en Chile, cuando se fue para no quedarse en Medellín comiendo natilla y escuchando música parrandera.

Fue en Chile donde se tatuó la palabra “arte” que lleva hoy en su hombro, en el otro se tatuó un cubo.

Asegura que está enamorado de esta época porque está viviendo lo que pronosticó Marx: la caída del capitalismo.

Apoya el movimiento de los Indignados. Se siente un Indignado.

“Yo soy la cagada y lo seguiré siendo”, dice él, riéndose, mientras muestra su tatuaje y posa al lado de una de sus pinturas para que le tomen una foto.

domingo, 22 de abril de 2012

ENTRE OJOS - Constantina Gómez García


He tenido a bien  descubrir sentires y belleza en poemas, prosas, letras  publicadas en redes sociales, blogs, páginas web…etc. 
Durante años en este maravilloso medio he encontrado personas con una gran capacidad de entrega en su decir y hacer del arte literario; esto  pone entre mis ojos sus letras para disfrutarlas ampliamente. En esta ocasión  tengo a la fortuna de tener entre ojos los escritos, el sentir de Saúl Sánchez Toro poeta Colombiano a quien agradezco su disposición, así como el regalo de su amistad. 

Saúl Sánchez Toro :
Nació en Manizales el 25 de septiembre de 1948
ESTUDIOS
Licenciado en Bibliotecología de la Escuela Interamericana de Bibliotecología de la (Universidad de Antioquia. Medellín – Colombia. julio 6 de 1973
Maestro en Bibliotecología. Escuela Graduada de Bibliotecología Universidad de Puerto Rico (Recinto de Rio Piedras, PR) Junio 7 de 1981
Diplomado en Gestión Universitaria. Universidad de Caldas. Manizales Colombia. Junio de 2000.
EXPERIENCIA LABORAL

Profesor "Instituto Mixto Camilo Torres", Marulanda, Caldas, Colombia. Abril 20 de 1968 al 14 de febrero de 1969.
Bibliotecario auxiliar del ICFES (Contrato Administrativo)Catálogo colectivo de publicaciones periódicas. Medellín, Antioquia, Colombia 16 de enero de 1972 al 15 de Julio de 1972.
Director Biblioteca Sociedad Antioqueña de Ingenieros y Arquitectos (S.A) Medellín, Antioquia, Colombia 15 de julio de 1972 al 30 de Junio de 1973.
Profesor catedrático: Curso Metodología de la Investigación Universidad Tecnológica de Pereira Pereira, Risaralda, Colombia 1974-1978
Director Departamento de Bibliotecas. Universidad Tecnológica de Pereira, Pereira, Risaralda, Colombia 10 de julio de 1973 a 31 de octubre de 1982.
Jefe División de Bibliotecas e información científica Universidad de Sucre, Sincelejo, Colombia, 8 de abril de 1983 al 15 de abril de 1985
Jefe Centro de Información Científica Escuela de Administración de Negocios EAN Bogotá, Colombia 15 de abril de 1985 al 1 de noviembre de 1988
Jefe División de Bibliotecas Universidad del Cauca. Popayán. Cauca, Colombia 19 de diciembre de 1988 a mayo 10 de 1993
Director Centro de Biblioteca e información Científica Universidad de Caldas, Manizales, Caldas, Colombia Mayo 11 de 1993 hasta 22 de diciembre de 2003. 
Como literato nos habla del arte de hacer poesía:
Hacer poesía, generar ideas que en forma sonora, rítmica, cadenciosa, atractiva, agradable  motiven al lector, parece algo fácil, definitivamente es algo en donde juega un papel muy importante la imaginación tanto del escritor como del lector, porque el uno genera y el otro interpreta.
El reto del escritor, estriba en atrapar al lector y sumergirlo en ese mundo maravilloso que su mente ha creado 
Otro aspecto difícil de la producción literaria y sobre todo de la poética, lo constituye la inspiración, porque hay días en que nuestra imaginación amanece más iluminada y con mayor productividad y encuentra notables fuentes en donde abrevar, o en ocasiones, no encuentra absolutamente nada, desfalleciendo completamente con una enorme sed de creación.

Estos poemas que encuentra aquí, amable lector, son el fruto de alguno de esos momentos en que la Musa estaba cerca:
Soneto

He buscado 

He buscado también el  amor de mil maneras
y cuando  al fin creía que lo había encontrado,
porque notaba mi  corazón  acelerado
como nunca lo sentí con otras compañeras.

Me desperté en  un mundo plagado de quimeras 
y todo derrumbándose a paso agigantado
al clarearse el día ya  no la encontré a mi lado
me dejó en su lugar ilusiones pasajeras.

Marchó sin un adiós y  ninguna despedida
quedando enorme vacío, dentro del corazón 
y mi alma taciturna, con la moral vencida 

perdida la confianza, marchita la razón.
se fue sin un motivo, no salió compungida
no se inmutó siquiera, al ver mi desazón.

© Saúl Sánchez Toro
Medellin , Colombia
Mayo 26 de 2011


Haibún del desconsuelo 

"Adanes trastocan escenas yla gesta de unos cuantos cuajan historias sin abrevaderos..."
Liliana Varela
La princesa sumergida en su apasionado mundo de inalcanzables, tendía hacia el infinito una maravillosa red, con la que pretendía atrapar los sueños de los entrometidos Adanes que trastocaban sus encadenadas escenas.

La tenue lluvia
cubría sus maravillas
y la agitaba

y esa calidez, le proporcionaba fuerzas titánicas para afianzarse a unos sentidos que la hacían cabalgar, en un trote armonioso e indescriptible, por las veredas imaginarias de su deseado Paraiso.

Su mente sentía
y su cuerpo sucumbía
por su presencia

Queriendo volar, no se desarraigaba de la tierra, que lentamente la devoraba y se la iba tragando, consumiendo, absorbiendo y disfrutando uno a uno los pétalos y todos los componentes de su maravillosa figura.

Sueños que vuelan
Arcoíris que se pierden
y desfallece

quedando la sensación de haber estado en un mundo en donde los adoquines eran incontables porque sin gravedad flotaban como papalotes, cometas que mecía con facilidad el viento...Y tu... flotando en medio del mar donde la luna gozaba de tu placidez. 
  
Saúl Sánchez Toro
Medellin , Colombia
Mayo 3 de 2011


Poesía libre

Caminante

"Caminante de la cuerda floja,..."
MorusGomez
Somos viajeros, caminantes,
andantes, errabundos,
que buscamos horizontes
donde más brille la luz.

Dirigimos nuestros pasos,
por senderos apacibles,
pero encontramos los cardos
que nos hacen desistir.

Andar por la cuerda floja
es quizás un solo instante,
pero basta ese momento
para hacernos abdicar.

Por eso pisemos firme,
busquemos otros caminos,
que saltando los escollos
nos conduzcan hasta el fin.


Saúl Sánchez Toro
Medellin , Colombia
Abril 18 de 2011


Sombras 


"...enlazadas penumbras ,silencian evocaciones y festejos.."
Ana Lucia Montoya Rendón



Sombras ebrias de sueños danzan en la oscuridad
se tropiezan, tambalean, se abrazan, se besan,
gozan placenteras sin temor ni inhibición;
se estrujan, se embelesan, se acarician,
se olvidan del ayer.

Viven de encanto y sueños que recrean de verdad.
Son efluvios de dos cuerpos que danzan con gran  pasión
y convertidos en llamas se esparcen, se contorsionan
iluminan el ambiente y proyectan su fulgor.

El vértigo las aprisiona, la jarra se resquebraja
el licor las acaricia... y las disuelve la luz 



© Saúl Sánchez Toro
Medellin , Colombia
Marzo 16 de 2011
Tus puntos...suspensivos

Subiré a lo más alto de tus signos
buscando cabalgar interjecciones,
me montaré en la más grande de tus letras
para poder escribir mis mil razones.

Me encerraré con tus interrogaciones
a dilucidar el dilema de tus puntos
y cuando estemos todos allí juntos
me alejaré de tus mases y tus menos.

Abrazaré con furor tus virgulillas
y  rendido caeré en tu coma,
y sin pensarlo dejaré en mis dedos
el suave palpitar de tu teclado.




Saúl Sánchez Toro
Medellin , Colombia
Mayo 28 de 2011
De Gnomos y Ondina


Akhatar voló hasta la cúspide de la montaña,
y parado divisó el hermoso Valle de Saffir.
Los abedules se contorneaban insinuantes
buscando atraer las madreselvas para que
se les treparan y los engalanaran con
sus hermosas flores.

Los canarios, sinsontes y ruiseñores 
entonaban un dulce serenata
que el Valle repetía con su voluptuoso eco.

Cuando vió que Assibar se acercaba
a la laguna, desnudándose y dejando sus tules
y alas en la orilla, pensó volar hacia ella.

Pero, en ese instante, se acercó Akeleth, 
quien despojándose también
de sus vestimentas y poniendo sus alas en una roca
se sumergió en las cristalinas aguas,
se aproximó a Saffir, la abrazó y la besó apasionado.
La acarició y haciéndole al amor 
formó con sus movimientos una gran
ola que se extendió por el Valle dándole vida 
al caudaloso Rio Amannat 
en el que quien se sumerja  recibe 
el bautizo de la Ondina con el que asegura su prosperidad.

Akhatar, enfurecido por los celos, se desagarró las alas
se lanzó al vacio, y asi nació el famoso abismo de Kalith
en donde muchos despechados 
van a enterrarse con sus ilusiones.

Saúl Sánchez Toro
Medellin , Colombia
Mayo 26 de 2011
Miembro activo de los portales: 

Mundo Poesía, (http://www.mundopoesia.com)
Unión Hispanoamericana de Escritores (UHE) (http://unionhispanoamericana.ning.com/profile/SaulSanchezToro),
En este portal fui destacado como el autor del mes de Enero de 2012 y han destacado algunos de mis poemas.

Fundación Literaria Argentina Internacional (http://fundacionliterariaargentinaint.com/profile/SaulSanchezToro)

Book ad (http://www.bookad.co/)
Publicaciones literarias:
Antología poética de Pereira. (Próxima a publicarse)
Poemas escritos en el blog Poemas al garete
http://poemasalgarete.blogspot.com/


INFINITO DE PALABRAS - Constantina Gómez García


En entrevista  cibernética viajamos a España  con al alegría de visitar a Magdalena Márquez, una gran amiga con la cual he compartido en varios espacios de la internet de poesía y literatura; actualmente miembro activo de letrassimbolicas@googlegroups.com.
Por ese transmitir de emociones que nos entrega en su prosa y/o poesía, por su calidez humana con la que nos cobija; tengo a bien la fortuna de entregarles su infinito de palabras. 

Magdalena Márquez, 
Nació  la capital de España, Madrid, ciudad a la que siempre ha amado apasionadamente, aunque tiene que compartir ese amor con otras ciudades del mundo, todas ellas por lo mismo, por la gran multiculturalidad que acogen y regalan.
 Ella nos relata: la vida me ha tratado bien, con sus luces y sus sombras. Me crié entre mujeres, éramos tres en casa, pronto sin hombres. Ahora los dioses han hecho que la tortilla se vuelva, convivo con tres hombres, dos de ellos adolescentes. Disfruto con mi trabajo, con la lectura, la escritura. La verdad es que  disfruto casi todo lo que me va viniendo día a día. Soy profesora,  enseño inglés a chavales adolescentes. A mí me gusta mucho más decir que soy  “maestra”.
¿Podrías decirme como llego a ti la poesía?
 La poesía me llegó de muy pequeña, de manos de mi madre, una mujer que aprendió poco más que a leer y a escribir pero que se bebe cualquier libro de poemas. También en mi niñez me llegó la poesía, y con ella un soplo de libertad de mano de alguna de mis maestras, hablo de la época en la que en España gobernaba un dictador, la poesía era un guiño al mundo libre
¿Y cuando empezaste a escribir? Jajajaja, de niña cambiaba ejercicios de matemáticas por redacciones, yo hacía las de muchas de mis compañeras. Escribía cuando era adolescente, pero prosa, nunca poemas. La poesía llegó mucho más tarde.
¿Después de tu niñez, hubo algún escritor que te motivó a escribir poesía? 
Lorca ha sido desde siempre mi poeta fetiche, el primero que me enamoró con su Romancero Gitano. Más tarde han ido llenando mis días Ángel González, Luis García Montero, Nicanor Parra, Leopoldo Mª Panero, Joaquín Sabina. Creo que cada vez que escribo sin quererlo imito algo de ellos. Con resultados que dejan mucho que desear, desde luego.
¿Hablemos ahora mujer social? En los tiempos tan convulsos que vivimos, el ser social juega un papel muy importante en mi vida. Sin proponérmelo me he visto involucrada en movimientos relacionados con la educación pública, las mujeres que sacan adelante a sus hijos sin ayuda de un padre, lo que me rodea al fin y al cabo. Y es un poco paradójico, porque por naturaleza soy poco “sociable”, me gusta la soledad, encerrarme en mi mundo, en mis libros y mis cuadernos, pero hoy en día es tiempo de vivir de puertas hacia fuera, ya llegarán tiempos más calmados.
¿Como nace la poesía en ti? A borbotones. 
Realmente me considero más prosista que poeta. Puedo sentarme, trabajar un cuento, retocarlo mil veces… En cambio la poesía explota, suelen ser sensaciones/sentimientos en estado puro  y generalmente la plasmo en el papel como ha nacido, sin retoques, por eso soy incapaz de hacer poesía rimada o siguiendo las reglas de la métrica.
¿Qué consejos le da a los que apenas comienzan? 
Uff, no podría dar consejos, soy sólo una aprendiz.
¿Algo que desees agregar? Quiero agradeceros no sólo el haber querido conocer un poquito más de mí, sino sobre todo por la intensa actividad que lleváis a cabo para que podamos compartir escritura, cultura, sensaciones al fin y al cabo, desde lugares tan distantes y a la vez tan cercanos gracias al amor por las letras que hace que nos sintamos más unidos.

Tal vez mañana.
Del  mañana la esperanza de una luz nueva
la que titila, temblando como un recién nacido
sin saber cómo caminará.
Del hoy lo que la vida me regala
o lo que yo imagino, ¿acaso importa?
los rumores de sensaciones nuevas, repetidas
reales o fruto de mi pensamiento.
¿Y qué si la noche me envuelve en su negrura?
¿Si  la incertidumbre se hace fuerte?
No, no dejaré que ocurra
Prefiero el pasar lento de las horas,
la incertidumbre que acompaña a mis días
y no me hago preguntas,
sólo vivo.
Y quién sabe qué nos deparará mañana
tal vez una risa continua,
una flor que se pierde en el cielo
mecida por el viento
o quizás una espina.
Tal vez mañana
si es que el mañana existe,
un día más abocado a ese paso de las horas
y quién sabe, un hoy al que aferrarse
sin querer lo que quiero
sin pretender más allá del regalo
que la vida depare.
Sin embargo
qué difícil un mañana sin sueños
un hoy sin armonía,
sin tal vez, sin quizás
Hoy martes 14 de febrero 
Que difícil soñar sin esperanzas
y que bellos presagios inconscientes
o puede que anhelados.
Porque sí, tal vez sea mañana
el momento perfecto
que dice que estoy viva.
Entre los muros de la calle vacía
el amanecer extiende sus ramas,
el sol se despereza contra las fachadas
arrastrando lentamente sus pies de plomo
y la muerte huye despavorida
ante la claridad que se abre paso.
Apenas se levantan las primeras persianas
y el olor a café atrae
los pasos somnolientos
a la vez que acaricia sensualmente
mi frágil esqueleto perezoso
que se arrastra por el helado suelo.
Siento frío  este jueves neonato
en que las venas se me hielan
como hilo tejiendo una mortaja.
Me paraliza el miedo,
atenaza mis manos
y el olor del café se torna hediondo,
corrompido de muerte fugitiva
invitándome al viaje inevitable.
Apresuradamente huyo sin rumbo fijo,
me lanzo entre páginas impresas
buscando un lugar dónde huir,
pero ya es tarde. Abro el periódico
y allí leo en las necrológicas,
un tal San Valentín, -siento un escalofrío-
ha muerto atrapado al quedar sepultado
al final de un poema.

Otoño
Sentada, disfrutando de la melancolía de un otoño que este año es especialmente extraño. No sólo siento la locura de esta estación en la que lo mismo llueve que aparece un sol radiante; en la que el frío del amanecer va seguido del calor del mediodía, sino que este año parece que el verano no quiere irse del todo y aún siento su energía. Esta estación me vuelve loca, me fascina, me engancha irremediablemente la paleta de colores que me regala día a día; me hace encerrarme en mí misma la prontitud con que llega la noche; me embarga de tristeza el gris que de vez en cuando tiñe el cielo más de la cuenta; me eriza la piel el sol que me acaricia descaradamente, sin esperarlo, pillándome desprevenida.

Tarde de otoño, el momento perfecto para sentarse en un banco y dejar que el sol, el aire, la vida te roce, te bese, te abrace, te arrulle. No hay mejor ocasión para dejarse mimar por la existencia, para sentir como una nueva energía recarga cada uno de tus músculos y la savia que se adormece en la naturaleza llena tus venas. Es el momento propicio para darse cuenta de que antes o después conseguiré eso que a veces parecen imposibles pero que el devenir de la vida me irá regalando. Es simplemente, hoy, ahora, el primer segundo que debo de aprovechar para intentar ser feliz.
¿ Muerte?
Después de que el monstruo hambriento llenase su panza se perdió en la infinitud, sólo asomando su periscopio para asegurarse de seguir el camino marcado.
  Tras un momento de avistar las señales que sólo él conocía, volvió a ascender alegre, dejándose acariciar la panza por ese algodon de azucar cual niño alegre en la verbena de cualquier pueblo. Dentro un continuo ronroneo adormecía a sus víctimas. Ella sonrió en medio del  silencio que podía mascarse más allá de ese sonido hipnotizante que producía el monstruo. Nada podía ocurrir sobre ese inmenso cojín de algodón.
Poco a poco el hipnotizante sonido pareció alcanzar al monstruo. Una urgente necesidad de descansar se apoderó de él. Ya no quería seguir jugando. Las cosquillas, suaves pero continuas de sus fieles amigas comenzaron a aburrirle, yo diría que incluso le molestaban. Ingrato como era decidió abandonarlas poco a poco, buscando un colchón no tan hermoso pero mucho más sólido donde descansar. Sombras de distintos colores se iban adivinando sin que nada pareaciese cambiar dentro de él.
 Un repentino coletazo hizo recordar la naturaleza del ser que nos tenía prisionero. Comenzamos a reaccionar. ¿Dónde apareceríamos? ¿Será vida?
  
¿Muerte?

HABLANDO DE LIBROS - Luisa Fernanda Vanegas


LA LOCA DE LA CASA – Rosa Montero

Este es el primer libro que leo de esta escritora española, el cual es presentando como una autobiografía teniendo presente los libros y las anécdotas de su vida.
Con un lenguaje fresco, gracioso nos recrea desde su infancia, juventud y adultez sin perder la picardía,  exponiendo de este modo fresco y llamativo la evolución de la literatura, su importancia y algunos datos curiosos de autores que ni siquiera imaginamos.
“Hablar de la literatura, es hablar de la vida; de la vida propia y de la de los otros, de la felicidad y del dolor”.
De igual manera deja claro el papel del lenguaje, que es comunicarse, y como el hombre ha evolucionado de tal manera que el lenguaje es el eje de esa evolución, de ese crecimiento que hace que todo tenga un sentido diferente, escribir es uno de los actos mas íntimos que realiza el ser humano y leer a otros permite confrontación y crecimiento de las propias ideas.  
“La narrativa, es una actividad íntima y esencial”
También es cierto que todos escribimos de forma diferente, de la forma en cómo lo sentimos, como lo vivimos, siendo la escritura una forma de identificarnos, de ver mas allá de nuestro pequeño mundo.
“Cada cual escribe como puede, porque la literatura viene a ser como una función orgánica mas, lo mismo que sudar”  
Por último nos deja un sabio consejo: Conviene no creer demasiado 


SENSIBILIDAD HECHA ARTE - Luisa Fernanda Vanegas

Ana Lucía Montoya Rendón
"totalmente coloquial y humorísticamente oscura"


 ¿Quién es Ana Lucía Montoya Rendón y cómo se define como artista?
Luisa Fernanda, primero que todo quiero felicitarte a ti, a nuestra amiga común, Tina Gómez, “Morus” y a todos los escritores que, con ustedes, se han dado a la tarea de difundir las Letras y el Arte en general, a través de la creación de la Revista Letras Simbólicas, nuevo y maravilloso espacio virtual, que, apenas iniciando actividades, muestra un número grande de decididos seguidores. Segundo, agradecerles esta invitación la cual me llena de júbilo  y de mucho orgullo, pues estar hoy aquí es de verdad un gran honor.
Definirse a sí mismo es gran pretensión porque  hay que partir de la base de que somos a la vez, el observador y el observado. Es decir, conocernos  perfectamente y,  si deseo ser  concreta al contestar esta pregunta, debo decir que, el conocerse o definirse como artista, es tarea bastante compleja porque es  como medir la carga de emocionalidad, concreción o abstracción que manejamos al describir o bocetar paisajes, o cosas, o circunstancias, o, yendo más lejos, detallar ideas, describir o apuntar características de los planos sutiles o de los planos más densos.  Por todo esto, siempre me declaro “aprendiz de todo y experta de nada”, con lo cual significo que, vivo un proceso infinito de búsquedas, dentro y fuera de mí. A veces, cuando me releo, siento que hago lectura de un “alguien” que en algún momento se ha asomado por mi mente y me ha dictado o “acosado” aquellos temas que expongo en mis poemas o en mis bocetos. Siento palpable en mí, la tristeza de ese alguien; siento que quiere ser alegre pero por alguna razón oculta, no lo consigue. También siento que él sabe cosas que yo no sé y,  además sé, mira hacia los mundos de manera tan diferente de como lo hago yo. Ese alguien se asoma de frente, se refunde en mi imagen cuando me miro al espejo,  pero finalmente, no logra desplazarme. Repito, definirme implica quizás, catalogarme dentro de un estilo, dentro de una línea de pensamiento, dentro de una gama de colores y no logro ubicarme en un punto exacto: ¿soy simbolista, o realista, o abstracta, o… simplemente, alguien que se sale de sí misma y escribe en esos momentos de delirio?

¿Cómo fue su acercamiento con las letras en sus primeros años?
Desde muy pequeña  oía recitar y cantar a mi madre, a mis tíos y tías. Luego comencé a ver libros por todos los lados. Algunos eran los libros de texto de mis primas que los dejaban en casa cada año cuando venían del internado. Recuerdo muy bien lo buenos lectores y poetas que eran que mis tíos maternos. También vienen a mi memoria,  aquellos momentos en que mi madre dedicaba parte de su escaso tiempo, a enseñarme a leer y a escribir. Aproximadamente a la edad de ocho años ya leía con mucho gusto y “apetito” todo lo que caía en mis manos,  aunque en muchas ocasiones no entendía casi nada. Leía de todo, incluso recetas de cocina que aparecían en las revistas Life y Vanidades en las que los ingredientes eran para mí, tremendo tema “oscurantista”. A partir de allí, la lectura siempre fue una pasión. Leía lo que había en la biblioteca del colegio y pedía prestados aquellos libros con los que mis compañeras de clase, presumían.  Años después conocí  la revista dominical, Magazín del Espectador, importante periódico colombiano, la que nos abría la puerta hacia el espacio infinito de las letras, de las artes plásticas, de la filosofía, de la política, de los temas sociales. En fin, nos enfrentaba con muchos horizontes y nos estimulaba hacia la búsqueda de autores y de sus obras reseñadas en los fascículos de cada domingo. Creo que la lectura es un proceso individual y es por este motivo que hay en el mundo tantos lectores como temas tratados. A lo largo de su vida, cada lector, se identifica con diferentes temas, acordes a su sensibilidad y a su profesión, si la tiene, de tal manera que, la “adicción” a la lectura, depende de los estímulos que una persona haya tenido a edad temprana.  De esta forma, sin darme cuenta, fui construyendo una línea de lectura a través de las novelas, la poesía, el ensayo, la historia, la religión, algunos temas filosóficos, etc. Hoy leo igual que antes, pero tengo una tendencia marcada hacia el ensayo, la poesía, las biografías… 

¿Cuándo comenzó a escribir poesía? 
Recuerdo que me enamoraba “de ojo” de los niños de mi vecindario, pero… ¡jamás fui capaz de hablarles  y creo que ellos nunca “notaron mi existencia”! A esos amores dediqué mis más amorosas, sentidas y pueriles palabras, las cuales depositaba en una libretita de hojas de tonos pastel, que me habían regalado el día de mi primera comunión. En esa pequeña libreta puse lo que con mi voz no podía decir, además, una niña de mi “educación en colegio de monjas”… jamás debería decir o insinuar “tales cosas”.

¿Recuerda su primer poema? 
No lo recuerdo. Solo sé que escribí muchos poemas y cartas entre los once y los diez y ocho años y que, unos días antes de casarme, rompí todos esos papeles. Hasta hace algunos años supe que mi hermana fue lectora furtiva de mis insipientes letras. Ella y algunas de mis compañeras de colegio, dan fe de mi interés por la lectura y la escritura.  

¿Algún autor la marcó en su forma de escribir?
No sé con certeza cuál.  Solo sé que entre más leía, más quería hacer aquello que hacían los autores de las obras que pasaban por mis manos.  Los cuentos de los hermanos Green, las novelas de Verne, los enigmáticos cuentos de Poe.  Los poemas de Lorca, Bécquer, Barbajacob, Neruda…, como para indicar algunos, aquéllos más antiguos, archivados en mi memoria. 

¿Cuál es el tema más recurrente en sus poesías?
Creo que mi persistencia está apuntalada generalmente en la mujer amada, en esa Eva primigenia o en la actual, en el amante, en la Vida, en la Muerte, en el Amor, en la Libertad; en los valores, en las virtudes. Si, siempre estoy subrayando con letras capitales a esos entes. Además, mi panteísmo, asoma en todo momento, porque al Hacedor de todo, lo veo en la Vida misma, en el Universo, en la Naturaleza, en la misma imagen del Hombre. Creo firmemente que Él es el Uno y el Todo. Por esto, la gran mayoría de mis textos, explicita o tácitamente, siempre Lo mencionan.

¿Cómo podrían ser clasificados  sus textos (su estilo)?
Dicen que soy oscura en mi forma de decir las cosas. Pero yo creo que soy “totalmente coloquial y humorísticamente oscura”, mas nunca pretendo serlo, sale sin buscarlo. Solo sé que cuando escribo, vienen al galope esas ideas o entes de muy dentro de mí. Describo todo lo que vive y pervive en mí. Detallo en la medida de lo posible, los mundos en que habito, digo con colores sonoros lo que hay dentro de mí. Nunca me digo, voy a escribir sobre esto o aquello, a menos que me pidan que hable sobre un tópico en particular.
No solo es escritora si no también artista plástica. Cuéntenos un poco de eso… 
El Tiempo dirá qué talla llegue a alcanzar y cuántas vidas deba durar este aprendizaje. A veces el Tiempo está tan ocupado en descorrer las cortinas del escenario para que el mundo mire y admire la obra de los verdaderamente grandes que, apenas si nos deja asomar al menos la uña de uno de los dedos meñique y con eso nos damos por muy bien servidos porque sabemos que por ahora hay que hacer lo posible e imposible para exhibirse orgullosos en esos sitios. Para ser grande hay que trabajar muy duro, ese es el reto y, la faena apenas se inicia.
Artista plástica quiero ser y voy caminando en ese sentido. Sé que me falta escuela pero, la disposición y la decisión de “ser  artista“, existe. Gusto dibujar figura humana, lo hago con grafito o carboncillo, sobre papel bond, periódico, cartón acuarelable o sobre tela. Por motivos que no viene al caso comentar, desde hace muchos meses no he podido ejercitarme en ello. Espero dentro de un corto tiempo, pueda reanudar esa actividad.

¿Qué pinta Ana Lucía?
Como dije antes, generalmente trabajo sobre la figura humana, me considero poco paisajista.  Generalmente trabajo sobre tela, sobre cartón o sobre papel; el medio me es indiferente. Utilizo  pinturas acrílicas u óleos, grafitos, cretas, carboncillos.

¿Sus pinturas van enlazadas a sus poemas?
No. Nunca he hecho un poema y de allí haya partido hacia la tela o hacia el papel de dibujo. Tampoco he hecho un dibujo y de él haya salido hacia el poema. Sí he escrito poemas donde el vocabulario es propio de un dibujante o de un pintor, como por ejemplo la palabra boceto, claro oscuro, silueta, valores o degradé de algún color, etc.

¿Cuál de estos dos talentos descubrió primero y cómo lo alimentó? 
El tiempo de iniciación o de origen es el mismo. Está ligado a mi infancia. Muy ligado a aquellos primeros años de mi vida en el campo, lugar de donde vengo y al que añoro regresar. Fui arrancada de allí a los seis y medio años. Traje conmigo hasta ese cajón llamado casa de ciudad, una cajita mágica, plena de memorias sonoras y multicolores, cargada con el aroma de la tierra mojada;  desbordante de neblinas, de musgos húmedos y de barro; muy brillante por las tonalidades  de Sol, de Luna y de estrellas que eran más relucientes allá, en el campo; traía mi cajita nunca saturada de la visión divina de los cafetales cubiertos de azahares, ni del aroma del trapiche, perfumado con el jugo dulce de la caña, hirviendo en los fondos de cobre, durante los días de molienda;  no eran exceso dentro de ella, los susurro de los guaduales y de los cañaverales, ni sobraba en ese inventario, la remembranza de los pollitos acabados de nacer, acurrucados debajo de la gallina clueca y celosa; ni era remanente, la imagen en mi retina de las pequeñas serpientes “rabo de ají “, retorciéndose sobre la tierra colorada del patio del frente de la casa, de la finca donde nací. Sí, de todo eso llené mi cajita mágica. Y aún está repleta de todos esos recuerdos.

¿Publicaciones , presencia virtual y real en algunos sitios?
Está en preparación un poemario titulado Versos Grises y otro, Poemas Encadenados (título tentativo), con la poeta argentina, Liliana Varela.
Publicada dos veces en el Magazín Virtual del  Espectador;  en octubre del 2010 en el Magazín del Espectador, primera edición en papel, después de muchos años de haber estado cesante;  editada en la Revista Sequoyah Virtual, del escritor puertorriqueño Carlos López Dzur; en Palabras al Sol, revista del grupo Muestrario de Palabras, edición No. 16. Mis poemas leídos en varios programas radiales argentinos, como Una Noche Inolvidable, del actor Carlos Fernández; en el programa Al Borde de la Palabra, de la poeta uruguaya, residente en argentina, Patricia Ortiz y Liliana Varela, argentina. 
Hay varios videos de mis poemas en Youtube y la publicación permanente de todos mis textos en mi Blog “Naturaleza y el Camino del Medio No. 2, aun en revisión.
Algunos dibujos y pinturas, en la página de Artistas de la Tierra. También estuve presente con algunas de mis pinturas, durante cuatro años consecutivos (2005, 2006, 2007, 2008), en el Festival Ricardo Nieto, ciudad de Palmira, Departamento del Valle del Cauca, Colombia, lugar en el que residí hasta el 2009.
Enlaces de algunos de los sitios donde hago presencia:

http://www.goear.com/listen/a4e0b73/boceto-ana-lucia-montoya-rendon
http://www.goear.com/CANTACLAROOO/songs/
http://youtu.be/MapN9yxeNbc
http://palabrasalsol-muestrariano.blogspot.com/
http://sequoyahmagazine.blogspot.com/search?q=ana+lucia
http://www.artistasdelatierra.com/artistas/carjana
http://www.artsalud.es/pagines/Ana-Lucia-Montoya-Redon.html
http://naturalezaycaminodelmedionumero2.blogspot.com/

¿Alguna anécdota en especial que desee contarles a nuestros lectores? 
Estaba yo de unos once o doce años y siendo ya proyecto de lectora empecinada y, para que no me dijeran nada en mi casa, me encerraba  a leer en el sanitario durante incontables horas o subía al techo de mi casa, hecho que aprovechaba para dar buenos paseos por los tejados vecinos,  pero por más que me aplicaba en caminar como gato y por más que me arrastraba como sabandija para que no me vieran, quebraba  tantas tejas tratando de buscar “algún tesoro”, que, finalmente llego el día en el que una vecina me descubriera  y acusara, por lo que me dieron tremenda reprimenda y cuidaron muy bien para que no regresara a ese “gatuno hábitat”. Desde ese triste e inolvidable momento no pude volver a mi “cielo”, pero, seguí por muchos años más, como incansable lectora de sanitario. Es más, creo que nunca he dejado de serlo, pues hay ocasiones en las que siento que descanso muy bien cuando leo unas cuantas líneas sentada, allí, en ese trono, tan común a muchos lectores en todo el mundo.
Hace algunos días, uno de mis primos, quien ha leído y oído mis poemas, dijo, -de algo valieron tus encierros en el sanitario-…!!!

NO BASTAN

Sí!
¡Cinco sentidos no bastan...!
Quiero diez en simultáneo.
Hagan eco
a tus miradas de fuego
resonancia de gemidos y jadeos.

Necesito el hamaqueo del viento
el susurro de las olas,
la mano de la brisa,
la lengua lasciva del fuego,
consentimiento de humedales,
el arco tensado de mi espalda,
y la flecha certera de mi arquero!

Necesito que me hables
con palabras sin recato,
que me mires y mirarte
cuando el cielo voyerista
se come nuestro encuentro.

El amor solo no puede...

¡Necesito del cielo y del infierno!

©Ana Lucía Montoya Rendón



NO TE VAYAS
  
"Por eso déjame morir, 
al cabo muriendo 
mis fantasmas se disculpan..."
Jesús Albo


a qué morirte 
si eres luz que cataliza sombras
eres impulso de las olas
a qué irte sobre ellas galopando
si sobre la neura de su espuma
acomodo mis impulsos verdes

míraame!!
soy jaca tremebunda 
tocando mil infiernos
acosada por agónicas esperas

no te vayas que sin tí no habríaa amaneceres
ni siluetas abrazadas en la oscuridad de la caverna

no te vayas tú
que con uno que se vaya
en equilibrio queda la moneda



ana lucía montoya rendón
febrero 2012